sábado, 15 de marzo de 2008

ISRAEL Y LAS FERIAS LITERARIAS

Como una “provocación” han calificado un grupo de intelectuales pro palestinos y en el mundo árabe en general la dedicación a Israel de una nueva versión del Salón del Libro de París, que ayer abrió sus puertas en medio de una fuerte polémica por el llamado de éstos a boicotear la cita, en el año en que se cumplen 6 décadas desde la creación del Estado judío.
Escritores invitados tomaban una u otra posición. "Aquellos que llaman al boicot no se oponen a la política de Israel, sino a su existencia", afirmaba el israelí Amos Oz, un defensor de la creación del Estado palestino. Por su parte, el egipcio Alaa al Aswani expresaba que “invitar a un país culpable de crímenes contra la humanidad es una falta muy grave”. Los escritores italianos se enfurecían ante el boicot y los franceses preferían callar.
El ambiente era una caldera. Los organizadores justificaban que no es el Estado de Israel el invitado, sino sus escritores. El siempre circunspecto Shimon Peres intentaba calmar los ánimos. Decenas de personas se manifestaban en las calles parisinas contra el bloqueo israelí en Gaza, al tiempo que gritaban “Israel asesino".
El evento continuará hasta el 19 de marzo y las repercusiones también. Un grupo ya está llamando a boicotear la próxima Feria del Libro de Turín que comienza el 8 de mayo por las mismas razones.
¿Debe dedicarse a Israel próximas citas literarias? ¿Son culpables los escritores de este país de las políticas de su Gobierno?

2 comentarios:

Rubén de Vicente María dijo...

Es sorprendente que mucahas veces la autollamada gente de la cultura o intelectualidad es quien actúa de forma más irracional e inculta, especialmente cuando su actuación tiene algún tipo de sentido político. No entiendo por qué se boicotea a los escritores israelíes, es una barbaridad.
Según los energúmenos de esta historia, ¿deberíamos no tener en cuenta a Paul Auster porque en EEUU hay pena de muerte y vetar a Omar Pamuk porque Turquía ataca los pueblos kurdos?

Lucía Barón dijo...

No me gusta nada que la política se meta en temas culturales. Es quizá el ámbito menos politizado de todos (comparado con la economía o la ciencia), pero está claro nada está a salvo. Así que cuidado con lo que escribes...